7 consejos (breves) para que optimices tus redes sociales

Debes estar en la red social en la que estén tus clientes. Y el primer aspecto sobre el que hay que reflexionar es para qué quieres utilizarlas. Dependiendo de esto, una plataforma u otra será más apropiada:

Twitter: la red social de la inmediatez.

Facebook: es la red social por excelencia y la que mayor volumen de usuarios tiene. Si tus clientes están en Facebook, esta es tu red.

Instagram: en contraposición a Facebook, Instagram cada vez gana más adeptos. Y es que el poder de la imagen es muy relevante para trasladar o bien la calidad de tus productos o bien lo experiencial de tus servicios.

LinkedIn: la red profesional. Una plataforma donde generar contactos comerciales y profesionales, atraer talento, dar a conocer tu negocio y estar presente en grupos de interés.

Te damos siete claves que debes tener en cuenta a la hora de utilizar las redes sociales:

Conoce bien tu empresa y tu competencia

Es necesario localizar a tu competencia en las redes sociales, e investigar bien cómo las gestionan y si tienen un plan establecido. ¿Cuántos posts publican? ¿Contestan a los comentarios? ¿Qué tono utilizan? ¿Qué tipo de hashtags usan? Debes aprender de sus aciertos y también de sus errores.

Analiza la comunicación de otros perfiles

Buscar referentes siempre ayuda a obtener una visión mucho más amplia sobre cómo comunicar los mensajes de tu empresa. Por ello es aconsejable fijarse en compañías que tengan una estrategia de redes clara y efectiva. Un perfil interesante de analizar es el de Netflix, pues combina muy bien diferentes tipos de elementos audiovisuales y los mensajes atractivos.

Fíjate unos objetivos

Este punto es muy importante. Los KPI’s que definas deben ser realistas, y para ello es preciso tener claro por qué estás en la red social que elijas y qué quieres conseguir con ello. Los objetivos deben ser SMART:

Específicos: plantéate conseguir, por ejemplo, 200 seguidores al mes, no “muchos” seguidores.

Medibles: ponte como reto captar 3 clientes nuevos, y no “algunos” clientes cada día.

Alcanzables: no te propongas tener 1.000 likes/retuits al mes si tu ritmo de crecimiento orgánico no es tan elevado.

Realistas: crecer orgánicamente en redes sociales se logra de forma progresiva, por lo que no debes crearte falsas expectativas.

En tiempo: acota temporalmente cada acción o campaña. De lo contrario, lo más probable es que no llegues a cumplir los objetivos que te has marcado previamente.

Acota tu público objetivo

No puedes dirigirte a todo el mundo en general. Debes tener claro el target al que debes llegar, y eso dependerá de tu sector y de tu actividad de negocio.

Piensa en cómo es tu cliente actual, pero también el potencial. Y empieza preguntándote lo más básico: ¿hombre o mujer? ¿De dónde es? ¿Qué edad tiene? ¿Nivel de estudios? ¿Ingresos? ¿Aficiones?

Muchas herramientas de gestión de redes sociales recogen este tipo de datos demográficos pero, por si acaso, te recomendamos que eches un vistazo a Google Analytics e interpretes los resultados de los visitantes de tu web.

Define el mensaje que quieres transmitir

¿Tienes claro qué es exactamente lo que quieres transmitir? Si no es así, plantéate qué es lo que le interesa a tu público. En este sentido sería interesante analizar qué páginas siguen, qué publicaciones comparten, etc.

El mensaje debe ser claro y conciso en todas las redes sociales en las que estés. Ten en cuenta que los usuarios no suelen permanecer mucho tiempo leyendo cada post, y de esta forma conseguirás una empatía mucho mayor con ellos.

Finalmente, es necesario que acompañes tu contenido con imágenes, vídeos y contenido multimedia e interactivo para conseguir más impacto y mejor engagement entre tus usuarios.

Planifica los tiempos

Es importante que tengas un pequeño timing para saber qué quieres publicar exactamente en cada momento. Establece un rango temporal (dos/cuatro meses) para planificar tus redes sociales.

Dedícale tiempo a cada una y planifica cuántas veces a la semana quieres publicar y qué contenido vas a compartir. La frecuencia de publicación más recomendable en cada red social varía: en Facebook se debería publicar entre 3 y 4 veces a la semana; en Twitter, 2-3 tuits al día; en Instagram, una publicación al día o cada dos días; y en LinkedIn, tres publicaciones a la semana.

Mide los resultados

Utiliza herramientas como Google Analytics para monitorizar los indicadores más importantes en tu web, como las visitas desde redes sociales, las tasas de conversión, etc. Además, cada red social tiene una forma de conocer las métricas más importantes para medir la efectividad de la estrategia. En ellas puedes ver cuánta gente ha visto una publicación, cuántos seguidores nuevos tienes, los «me gustas» nuevos de tu página, etc. Analizarlos y establecer conclusiones sobre la efectividad de tu estrategia es esencial.

Información de: ideasparatuempresa.vodafone.es